CRISIS DE DEUDA
Una crisis de deuda es un fenómeno económico que atraviesan países u organizaciones supranacionales al experimentar problemas de financiación, normalmente relacionados con dificultades en el pago de sus compromisos o la gestión de tipos de interés. Generalmente este tipo de crisis financiera para los países surge por acumular un gran volumen de deuda, tras la excesiva emisión de títulos de deuda pública cuya finalidad principal es la financiación a corto plazo y poder afrontar pagos inminentes o compromisos presupuestarios. Es decir, cuando el Estado no aborda el pago de sus compromisos devolviendo los préstamos obtenidos o sus intereses respectivos.
El estudio del tamaño y la peligrosidad de este tipo de crisis económica se centra en la relación que exista entre la deuda pública con la que cuente un país en particular y el volumen de PIB en el que se mueva anualmente. Esto ayuda a los economistas a conocer cuánto tendrá que producir el Estado en un ejercicio para poder afrontar sus deudas externas, es por eso que muchos países establecen dentro de su constitución un techo de deuda en términos porcentuales con respecto al PIB, que generalmente oscila entre el 40% y 60%; dando así un tanto de seguridad al momento de solventar la deuda. Otra modalidad existente es recurrir a la relación que guarde el PIB con el déficit público.
Las crisis de deuda son conocidas también en el ámbito económico y financiero como crisis de deuda pública o de deuda soberana. Históricamente han sido experimentadas en periodos bélicos o junto a otros tipos de crisis.