CORRETAJE
El corretaje es la remuneración que recibe un contratista o corredor de comercio por los servicios prestados a una persona u organización. El contrato de corretaje es aquel que se celebra entre una persona que tiene los conocimientos adecuados y los medios disponibles y un tercero interesado en acceder a un activo. Podemos decir que el corretaje es la minuta abonada al contratista por poner de acuerdo o abrir las vías para el acceso de su cliente. Sin embargo, el corretaje no es una comisión en sí misma, sino un servicio de consultoría por conseguir acceder a algo en concreto.
Generalmente está asociado al mundo financiero por los brókers, donde éstos reciban una minuta en base a los servicios que realizan para su cliente, si bien, esta minuta será corretaje si el broker sólo cobra por abrir las vías hacia un fondo, acciones y similares, y no por operar con ellas.
La figura del corredor es de mero trámite de acceso a ciertos campos, de ahí que a veces se le denomine facilitador, sin más, a diferencia de otras figuras mercantiles que cobran por los rendimientos que puedan obtener para su clientes, y cobran una minuta fija y mayormente variable por las ganancias.
Con la información anterior, podemos decir que el contrato de comisión se diferencia del contrato de corretaje en que el primero actúa en nombre propio, es decir, realizar actuaciones y toma decisiones en propia voluntad de acuerdo a lo que le ha sido indicado por el propietario o porque éste no tenga los conocimientos adecuados, mientras que el corredor realiza sus actuaciones de acuerdo a la voluntad del propietario, es decir, realiza actividades que facilitan el acceso a los mercados, activos y similares, y no ejecuta órdenes propias, sino que sólo abre caminos.