China pone sus ojos en África | Sobre todo | Foro

Un interés no común, de China en África ha dado lugar a una enorme variedad de reacciones en todo el mundo. La respuesta del Occidente en general ha sido negativa y alarmista. Sorprendentemente, algunos en África también han adoptado críticamente estas respuestas.

Más que una fuerza negativa, la participación de China en África tiene que ver con la posición refundida de África en la economía mundial. y por ello tratara de contribuir en gran medida a las percepciones cambiantes de África para demostrar un continente lleno de oportunidades de negocios.

África se enfrenta a numerosos desafíos de desarrollo y sin duda es el continente más estereotipada y difamado en este planeta. Sin embargo, es importante señalar que la suerte de África están en aumento. Hace diez años la revista The Economist tenía un artículo de portada que decía: "África, el continente sin esperanza". El año pasado la misma revista tenía un título completamente diferente: "Rising Africa" (África esta surgiendo).

Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), al menos ocho países del África se encuentran entre las posiciones mas altas para mostrar la mayor tasa de crecimiento en el mundo (alrededor del 7%): Angola, Nigeria, Ghana, Zambia, Burkina Faso, Etiopía, Rwanda y Sierra Leona.

Es importante para África de consolidar esos logros y no distraerse con debates enmarcados por los países que se ocupan de sus propios desafíos.

Numerosos mitos abundan sobre la participación de China en África. Estos mitos se enmarcan en la narrativa de que China es el nuevo super-donante o colonizador del continente. Pero el hecho es que en 1975 China contaba con programas de ayuda en más países africanos que la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID). China realizo el primer proyecto de ayuda oficial en África en la década de 1960, y en 1975 se terminó la construcción del emblemático ferrocarril Tanzania-Zambia.

Otras acusaciones formuladas contra China entran en el reino de hacer la vista gorda a los abusos de derechos humanos para proteger los intereses económicos. Los críticos argumentan que China utiliza la ayuda para tener acceso a los recursos naturales, que las empresas chinas prefieren enviar empleados chinos para trabajar en África en lugar de contratar a trabajadores locales, o que las inversiones de China se dirijan a regímenes autocráticos.

Pues bien, los mismos críticos no dicen nada de los gobiernos occidentales y las empresas que participan en los países africanos con dudosos antecedentes en derechos humanos. Las compañías occidentales de América y otros abundan en Guinea Ecuatorial y la región del delta de Nigeria, donde hay denuncias de violaciones graves de los derechos humanos.