La dependencia de Latinoamérica de otros países puede condicionar su crecimiento | Análisis Fundamental y Técnico | Foro

La marcada vinculación que ciertos países latinoamericanos tienen con Estados Unidos y con China en algunos casos, puede incidir en el crecimiento de sus economías en un mediano plazo, de acuerdo al comportamiento de esas dos potencias.
Los países de América del Sur, que estámos más expuestos a un impacto negativo en caso de que se produjera una situación económica negativa en China se beneficiaría menos de un crecimiento alto en Estados Unidos.
Hay que recordar que la desaceleración de las economías emergentes es uno de los rasgos más destacados de la economía global en años recientes; como ejemplos tenemos a China, Brasil, México, India y Sudáfrica, con crecimientos promedio de 6,5 % al año entre 2004 y 2008, mas su crecimiento esperado en los próximos cinco años es de 4,7 % al año.
Estados Unidos empieza a dejar atrás la Recesión de 2008, empezando a retirar las medidas de estímulo, y se proyecta que el crecimiento irá desde un 1,9 % del año pasado a 2,8 % en 2014.
Esa aceleración se daría a medida que en el país del norte desaparezcan restricciones fiscales, se mejore el mercado de la vivienda y el balance de los hogares. Si el crecimiento de Estados Unidos llegase a un 4 % en 2015, y la normalización de la política monetaria sigue su avance se calcula que su crecimiento aumentará al 6 % en 2015

Pero si el crecimiento chino baja a 5,3 % en 2015, es probable que el crecimiento regional caiga hasta un 1,5 % en ese mismo año. En la actualidad se espera que el PIB chino aumente hasta 7,5 % este año y se desacelere al 7 % hacia 2016. Por otra parte las dos economías mayores de Latinoamérica, Brasil y México, tendrían direcciones opuestas .México ganaría más por mayor crecimiento en Estados Unidos y se afectaría menos por tendencia negativa en China, y a Brasil le perjudicaría más la desaceleración del crecimiento chino.

Por su parte en Colombia las tasas de crecimiento son bastante sensibles a estos impactos, aunque en El Salvador el efecto es casi nulo
Se espera que la región crezca con mayor rapidez en los próximos dos años que en los tres años anteriores, pero las tasas proyectadas por el BID para América Latina y el Caribe son de un 3 % en 2014 y un 3,3 % en 2015, cercano al crecimiento potencial.
Ese crecimiento, sin embargo está por debajo de las tasas de crecimiento de antes de la Recesión, que fueron del orden del 4,9 % en 2003-2007.

Crecimientos a ese ritmo no permitirán a la región cumplir numerosas necesidades sociales aún insatisfechas, y son sustancialmente inferiores a las de otras regiones emergentes como lo es el este asiático.