Efecto de la reducción del estímulo en la economía de AL | Análisis Fundamental y Técnico | Foro

El Fondo Monetario Internacional ha revisado a la baja sus estimaciones para los países latinoamericanos. El organismo situó el crecimiento económico de la región para 2013 en el 2,7% y el de 2014 en el 3,1%, en ambos casos tres décimas menos que lo previsto el pasado julio.
Esta revisión a la baja va en línea con las predicciones que realiza el FMI para la economía mundial. Este prevé que el producto interior bruto (PIB) global crecerá 2,9% este año y 3,6% en 2014, lo que significa un recorte de dos décimas sobre los pronósticos pasados.
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El FMI menciona dos factores claves para justificar estas revisiones a la baja: la reducción en la velocidad del crecimiento de varios países emergentes (entre ellos China) y las dudas sobre el impacto de la retirada de estímulos en EE.UU.
La Reserva Federal (Fed) informó hace meses que iniciaría a finales de este año la retirada de su programa de impulso a la recuperación económica, el cual consiste básicamente en compras de bonos por US$85.000 millones al mes.
Cuando esto ocurra, una de las regiones que más se verá afectada será Latinoamérica por su elevada dependencia de la economía estadounidense.
Un movimiento inesperado de subida en las tasas de interés de EE.UU. obliga a inversores y agentes económicos a la revisión de sus planes de inversión antes de lo planificado. Un aumento de tasas lleva no solamente a una disminución del flujo neto de capitales a economías latinoamericanas, sino que también hace que el costo de la deuda pública aumente.
El profesor Alejandro Reyes González, director de investigaciones económicas de Ultrabursatiles y profesor de Macroeconomía de la Universidad Javeriana de Colombia, señala que el efecto sería un menor ingreso de capitales e incluso la retirada de los mismos. Añadió asimismo que este movimiento del flujo de dinero tendría un impacto a corto plazo sobre el valor de los activos, y en el mediano plazo generaría el rebalance de los flujos de inversión directa que hasta el momento siguen fluyendo fuertemente a la región pero podrían verse afectados a medida que la dinámica regional se vaya desacelerando.